Artrosis: ¿Son los condroprotectores una ayuda?

 

La artrosis es una de las patologías más frecuentes en animales de edad avanzada. Afecta tanto a perros como a gatos. Aunque es más común en perros sobre todo los que son de raza grande que pueden padecer problemas articulares desde el año de edad.

Uno de los signos principales por los que acuden los dueños a consulta es por la aparición de una cojera. Los perros con artrosis pueden presentar inmovilidad, dificultad para incorporarse, rigidez articular, dolor crónico o incluso negarse a dar paseos. También puede mantenerse la cojera de manera persistente o ser intermitente.

La mayoría de los síntomas pueden aparecer de manera repentina, por ejercicio excesivo o después de un golpe o traumatismo.

Cuando aparece dolor, éste se debe a la perdida de calidad y grosor del cartílago articular. El cartílago con los años va deteriorándose llegando a producir la práctica desaparición del mismo, inflamación en la cápsula articular y la producción de osteofitos. Los osteofitos son formaciones o protuberancias óseas que se forman a lo largo de los huesos.

Condroprotectores: ¿Qué son y de que están compuestos?

 

Son unos complementos alimenticios que favorecen la hidratación y nutrición del cartílago articular.

La composición de los condroprotectores más habituales son la glucosamina, el ácido hialuronico y el condroitín sulfato.

La glucosamina aumenta la síntesis de componentes de la matriz por parte de los condrocitos. La acción sinérgica del condroitín sulfato y la glucosamina potencia el efecto a este condroprotector.

El Ácido Hialurónico, contribuye al correcto mantenimiento del líquido sinovial, esencial para recuperar la movilidad articular.

El Condroitín Sulfato es uno de los principales elementos constitutivos del cartílago, junto con el proteoglicano,  otorga al cartílago propiedades mecánicas y elásticas, contribuyendo a una correcta hidratación del cartílago.

Los condroprotectores son inocuos, y no producen efectos adversos ya que se tratan de un producto natural y presente en el organismo. No es un medicamento, sino un complemento nutricional. A su vez, hay varios alimentos secos que incorporan en su composición niveles de glucosamina y condroitin sulfato para favorecer la salud articular. A diferencia de otros tratamientos, puede administrarse durante períodos prolongados de tiempo sin perjudicar al organismo.

Se puede administrar tanto a perros de razas con especial incidencia de displasia de cadera como el mastín y pastor alemán, como durante su crecimiento y en perros mayores que presentan problemas.

No existen inconvenientes para su administración en perros durante el crecimiento. Podemos comenzar a incorporarlo desde los 3 meses de edad hasta que finalice el período de crecimiento en torno a los 10 meses (aunque caben variaciones según la raza).

Existen diferentes estudios que afirman que el uso continuado de condroprotectores favorece la salud articular de nuestras mascotas. Desde mi experiencia personal, puedo constatar que una buena alimentación unida a su administración en animales que presentan dolor articular puede mejorar su calidad de vida sobremanera.

En el mercado, hay gran variedad de condroprotectores.  Si tu mascota presenta alguno de los signos clínicos indicados anteriormente, visita a tu veterinario. La incorporación de estos suplementos le ayudará a tener una mejor calidad de vida y repercutirá positivamente en su estado de salud .

 

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