Sobrepeso en felinos: un problema creciente

Así como ocurre en humanos, la obesidad es uno de los problemas nutricionales que afectan a nuestras mascotas. Cada vez es más habitual que en las visitas a la clínica, los pacientes presenten un estado de condición corporal que supera el peso óptimo. Además estudios recientes han puesto de manifiesto una tasa de incidencia de obesidad oscila entre un 17% y un 52%. ¿Qué consecuencias puede tener la obesidad?

La obesidad podemos definirla como un exceso de peso mayor al 20 % del peso ideal. Existen a su vez determinados factores de riesgo que contribuyen a su desarrollo como:

• La edad avanzada, normalmente se alcanza un pico en torno a los 6-8 años de edad.
• El sexo, existe cierta predisposición a que los machos padezcan obesidad.
• Enfermedades endocrinas
• Dieta casera desequilibrada, dieta con exceso de grasas y administrada a libre disposición y exceso de premios o golosinas.
• Razas mestizas/ Europeo común
• Gatos castrados/esterilizados que disminuyen su actividad
• Un único gato en casa que no tiene compañero de juegos
• Inactividad
• Medicación hormona-dependiente.

¿Como afecta la obesidad como enfermedad?

Muchas veces consideramos la obesidad como un exceso de peso corporal sin considerarlo un problema más grave. Esto no debe ser así, la obesidad ha de ser tenida en cuenta como una patología con numerosas consecuencias para la salud y el bienestar de nuestro gato.

Existe una relación directa entre obesidad y el padecimiento de otras patologías como pueden ser la dificultad respiratoria (disnea), hipertensión, intolerancia al ejercicio y al calor, problemas cardíacos y complicaciones en procesos quirúrgicos durante la anestesia.

¿Cómo tratar la obesidad en gatos?

• Primeramente, se realizará un estudio clínico completo del gato para partir de su estado de salud y comprobar que no existan patologías concomitantes que puedan complicar el tratamiento tales como: endocrinopatías, enfermedades renales, hepáticas, urinarias…
• Cambios en el estilo de vida del gato y asesoramiento educacional al dueño de los problemas que conlleva tener un gato con sobrepeso.
• Realizar un plan dietético estricto evitando suministrar golosinas y complementos alimenticios a mayores.
• Establecer cuáles son las necesidades energéticas diarias y comparar con el consumo actual del gato.
• Animar al dueño a una mayor interacción con su mascota mediante el juego y la realización de ejercicio.
• Enriquecer el entorno, con juguetes específicos como los dispensadores de Kong que dificultan el acceso al alimento aumentando el ingenio de nuestro gato para conseguir su comida, rascadores que tengan una altura que les permita saltar, colgarse de cuerdas…; En definitiva, favorecer la realización de actividades para no contribuir al sedentarismo.
• El cambio de dieta y de consumo energético se hará de manera paulatina para que no genere en el gato cambios bruscos de comportamiento debido a la restricción de alimento.
•  Muchas veces asociado a la obesidad se originan otros problemas que deben ser tenidos en cuenta a la vez como pueden ser un pelaje más pobre y sin brillo, alteraciones en las articulaciones, disminución del consumo de agua que puede desembocar en un FLUTD, variaciones en la flora intestinal, acumulación de triglicéridos en los hepatocitos, etc…

En conclusión y para finalizar, la elección del alimento es clave a la hora de comenzar una dieta equilibrada que cumpla todas las expectativas que nuestro gato necesita.

Existen una amplia variedad de alimentos en el mercado y podemos elegir el que mejor se adecue a nuestras necesidades y a las de nuestro gato, siempre bajo recomendación de vuestro veterinario de confianza. Particularmente, y por experiencia propia os recomiendo este pienso de la gama Hill’s prescription diet que cumple su función a la perfección.

¡Os espero en el próximo post!